Después de unos meses en continuos tiras y aflojas con huelgas y amenazas de los trabajadores, la reforma de la estiba que desregularizaría el sector y conseguiría aperturar más este tipo de sector, sigue en punto muerto.

El ministro de Fomento , Iñigo de la Serna ha reconocido que todavía no están todos los puntos en acuerdo. Se necesita dialogar más, explicar las voluntades necesarias  y ceder por ambas partes.

De la Serna, comentó en desayuno informativo que no tiene todos los votos necesarios para aprobar el decreto. Es por ello, que se sigue manteniendo el diálogo y reuniones con todos los partidos políticos para conseguir el apoyo suficiente en el Congreso de los Diputados.

Parece ser que el punto complicado es llegar a tener el respaldo de los nacionalistas catalanes que aún no lo tienen. Todos los actores implicados entienden que es urgente lograr un acuerdo para acabar con el conflicto y con el incumplimiento de la sentencia europea que nos hará pagar sanciones excesivas. Es una problemática que arrastra al transporte y otras empresas logísticas relacionadas.

La repercusión se está dando también a nivel de concienciación y ya hay voces de muchos ámbitos que claman una reforma urgente y el cese de este “monopolio” por parte de los estibadores.